Egresado German Olmedo, inspiración y pasión por la gastronomía

 

“La gastronomía es una profesión que tiene mil puertas para abrir; siempre hay una aventura nueva”

En diálogo con el Chef Germán Olmedo, egresado de nuestra institución, conocimos sobre el recorrido de su experiencia laboral y la actualidad de su carrera.

Germán cocinó en ceremonias como el Premio Nobel y el Festival de Cannes, para el plantel del Barcelona FC, en el recientemente considerado mejor restaurante del mundo, en hoteles y hasta para refugiados migrantes. Su perfil aventurero lo ha llevado a conocer las artes culinarias de varios países de Europa, ejerciendo su profesión con pasión en cada una de sus experiencias.

Tras finalizar el liceo prematuramente, con tan solo 16 años, Germán quiso tomarse un año sabático antes de estudiar el profesorado en literatura. Pero siendo un joven inquieto, quería tener herramientas que le ayudaran a conseguir un trabajo para solventar sus estudios. Fue así que, en el año 2004, Germán encontró un aviso en el Diario El País con la propuesta del recientemente inaugurado Instituto Gato Dumas para estudiar cocina. Decidió inscribirse en el curso que al año le otorgaría el “Diploma de Alta Cocina” y, durante el ciclo, tuvo la oportunidad de hacer sus prácticas en un hotel de Colonia del Sacramento. “Ahí ya me gustó realmente la cocina y, al final, me olvidé de ser profesor”, afirma sonriente.

Desde allí, inició un camino en el que no se detuvo. Luego de varias experiencias en Uruguay, con tan solo 20 años, decidió migrar a Estocolmo para darle otra vida a su flamante título. Germán recuerda que durante esos primeros años trabajaba con un Chef inglés que participaba asiduamente en la Cena de Gala de los Premios Nobel. Con su personalidad curiosa e inquieta, Germán le manifestó que quería acompañarlo en alguna oportunidad. La misma no demoró mucho, porque al año siguiente pudo acompañarlo, formando parte del staff de cocineros que llegaban desde 45 países para preparar el menú de esta distinguida cena a la que asisten los premiados, la realeza sueca y otros invitados. Fue así que Germán se convirtió en el primer Chef uruguayo que cocinó en el banquete de honor que se celebra tras la entrega de los galardones.

Durante años, el joven Chef uruguayo se dedicó a preparar banquetes e incursionó principalmente en la cocina sueca e italiana. Hacia el año 2016, Germán cuenta que anexó una nueva forma de ejercer la profesión desde el trabajo social: cocinó para refugiados en Grecia, Italia y Serbia, donde la crisis migratoria contó con sus manos para alimentar a los necesitados. “En esa época, simplemente me tomé un avión, vi la situación y dije ‘¿en qué puedo ayudar?’, y allí pude colaborar con la cocina para alimentar a 1500 o 1800 personas por día. Fue una experiencia única”, destaca Germán y agrega: “Esto fue un contraste porque venía de cocinarle a los reyes y laureados con vajilla de oro a personas que no tenían ni dónde dormir”.

Luego de estas experiencias, Germán, aun residiendo en Estocolmo, logró desempeñarse como Chef de la Embajada de Uruguay en Suecia, donde tuvo la oportunidad de preparar eventos especiales para promocionar los vinos y productos uruguayos en aquel país.

Hacia 2019, Germán buscó emprender en Uruguay y abrió un restaurante de cocina balinesa en Montevideo, en el que dejaba a cargo a sus hermanas mientras él continuaba sus experiencias en Estocolmo. Allí fue el responsable de diseñar y supervisar minuciosamente el menú. Pero, como resultado de la pandemia en el año 2020 y las restricciones que consigo trajo, el restaurante debió cerrar sus puertas.

Estocolmo dejaría de ser su hogar por algunos años para residir en Barcelona, donde se dispuso a realizar una maestría en Artes Culinarias, al tiempo que comenzó a trabajar en el Camp Nou del Barcelona Fútbol Club, donde tenía la tarea de cocinar para todo el staff, incluido el plantel de jugadores.

Iniciaba el año 2022, y en febrero, cuando tropas rusas cruzaron la frontera en varios puntos e invadieron Ucrania. Comenzaba la guerra (aún vigente) entre ambos países y la ayuda de voluntarios para todo tipo de tareas sería una necesidad básica para los refugiados ucranianos. Germán no dudó en brindar su ayuda para nuevamente aportar sus habilidades en la cocina para prepararles las comidas diarias.

De regreso en Barcelona, el espíritu inquieto de Germán lo llevó a buscar nuevos desafíos. Fue así que encontró un nuevo lugar en el que ofrecer sus conocimientos y adquirir nuevos: era el restaurante “Disfrutar” el que le ofrecería su nueva cocina. Y aquí lo esperaría otro galardón para su carrera porque, recientemente, dicho restaurante no solo recibió su tercera estrella Michelin, sino que también fue elegido como el mejor del mundo en la lista The World's Best 50 Restaurants. “Esto sirve mucho para mi currículum porque, durante el período que fue evaluado el staff para ambos reconocimientos, yo formé parte”, destaca Germán.

En este tipo de restaurantes de alta cocina, la exigencia es muy grande: “Es como ser un deportista de alto rendimiento: exigen concentración, hay muchísimo estrés y más de 15 horas diarias de trabajo”, subraya. “En este restaurante, por ejemplo, éramos 45 cocineros para 30 comensales. La alta cocina a ese nivel es muy exigente y no es común la permanencia de los chefs por mucho tiempo”, agrega.

Tras finalizar su experiencia en el destacado restaurante barcelonés a fines del 2023, antes de regresar a Suecia, Germán emprendió viaje a Uruguay para pasar tiempo con su familia. Durante su estadía aquí, retomó un viejo anhelo y puso manos a la obra para hacerlo realidad: “Quería formar parte de algún crucero. Entonces, estando acá, envié un par de currículums y me llamaron, así que más o menos volví a Estocolmo con trabajo”, cuenta.

Para el momento de esta entrevista, Germán se encontraba en un crucero que navega el Mar Báltico. Se desempeña como jefe de cocina del restaurante más elegante del barco y está 10 días a bordo y otros 10 en tierra.

En esos días que se encuentra libre de su actividad en el crucero, Germán aplica para empleos temporales a través del sistema de las “Empresas de Trabajo Temporal”, las llamadas ETT, que ponen a disposición trabajadores calificados a otra empresa que en ese momento los requiera. Es común el uso de apps para aplicar a estos trabajos y así fue como una de esas empresas contratantes lo envió, por ejemplo, a ser el responsable de la cocina para el show de Taylor Swift el pasado 17 de mayo en Estocolmo. Germán estuvo a cargo de cocinar para la artista, su staff de bailarines y técnicos.

Las anécdotas de Germán son muchas y muy interesantes de escuchar. Dan cuenta de un profesional de la gastronomía que no duda a la hora de adquirir nuevas experiencias y seguir aprendiendo. “Siempre que puedo inspirar a un joven cocinero uruguayo lo hago, y lo animo a que se puede llegar a las metas”, dice Germán, y subraya que “la gastronomía es una profesión que tiene mil puertas para abrir; siempre hay una aventura nueva”.

Germán destaca la gran cocina que tenemos en Uruguay la cual, siempre que puede, la lleva a que la prueben comensales de diferentes partes del mundo.

El Chef uruguayo Germán Olmedo estuvo a cargo de la cocina en el Ice Hotel. Situado en el pequeño pueblo de Jukkasjärvi, al norte de Suecia y a solo 200 kilómetros del círculo polar Ártico, es el primer hotel del mundo hecho enteramente de hielo.

Parte del staff del restaurante barcelonés “Disfrutar”, que recibió 3 estrellas Michelin a fines del 2023.

Germán en el Arena Stockholm luego del concierto de Taylor Swift en mayo de este año. Allí cocinó para 860 personas.